La señora Marita tiene el pelo negro con canas, unos ojos azules desvaídos y una piel resecapegada a un esqueleto. Porque la señora Marita apenas come y, desde hace cinco años, cuando murió su marido, no se le ha visto hombre que entrase en su casa. La señora Marita debe sentirse sola.
      Yo la conocí antes, cuando llevaba cuando llevaba a su marido como si fuera un sargento: Fermín, ¿has pagado a los jornaleros lo justo? Mira que tienes la manos como un colador, que se van las monedas como el agua. Fermín, deja ya de beber ese apestoso vino, que luego das trompicones y no hay quien te lleve a la cama. Fermín, deja de rozarte con María, que es difícil encontrar criadas y ésta se nos va a ir si se enfada. Fermín, ¡dúchate! Fermín, ¡come! Fermín, ¡haz algo!
Fermín murió de aburrimiento y ella, sin él, no debe saber a quién mandar. Cierto que nosotros la obedecemos, pero para la señora Marita debe ser distinto.

      Ahí la tiene usted, con sus vestidos a la moda y su peinado corto; con su andar apresurado y la boca fruncida. Ahí la tiene usted, presente en cualquier lugar menos en dónde debería estar.
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      Si viniera un hombre que descerrase su puerta, la señora Marita se convertiría en señorita. Les pondría a sus ojos un azul celeste y se teñiría las canas; volvería a comer y a tener una buena cintura; aunque, conociendo a la señora Marita desde hace tanto tiempo, no le dejaría entrar. A ella le gusta que la llamen señora.

Fue un parto natural, Belén, lo único que puedo hacer en estos momentos. Nada de repeinadito y aseo exhaustivo, o presento al niño recién nacido casi como nació o...nada.
Igual me pasa con el pulido, cojo los relatos y digo: ¿por dónde andaría hace una hora? y busco; ¿qué es lo que no me "sonaba"? y busco; ¿que razonamiento seguí para estar de acuerdo con Fernando? y busco. A todo esto se me perdieron las llaves, olvidé poner la lavadora o no recordé dónde había dejado la cabeza.

Lo del vientre inflado fue a propósito. La señora Marita había eliminado todo placer en su vida, entre ellos la comida (recordé a los niños desnutridos con el vientre hinchado y así se me representó: seca más que delgada), y quería hacerlo con la vida de los demás. Parece que lo consiguió, por ello la muerte de su marido por aburrimiento.

No obstante, ahora, noto un no se qué que no sé cómo que me rasca. Revisaré.

Gracias por leer, asturianina.

Hola chicas.
¿Asesinar a los maridos? Uff

Por cierto, los divorciados; ¿se librarán?

Mila, amiga: esta parte no me acaba de cuadrar, te la refiero y luego por mp te dejo mi opinión.
ahora ando escaso de tiempo OK



Yo de ti (sin acento), buscaria un giro a estas frases.

Te falta algúnos signos de puntuación, algún ¡! , en "duchate", "come" y "haz algo", pues estás enfatizando estas palabras; ademas, le aplican valor de imperativo y en la parte que: "no tardará mucho en irse", han pasado 5 años, yo de ti cambiaría la forma verbal "tardará"; futuro indicativo. Si la frase la utilizas para expresar que a consecuencia de la muerte del marido. la suya está al llegar (muy pronto). Quieres expresar acción cercana y no la incertidumbre de cuando sucederá.

Yo reescribiría la frase así: por ello se murió de aburrimiento y (no sé si convendría poner la preposición "a") ella, sin él, le echo un par de meses, a más tardar.

Salu2.

Gracias, Blanca, por entrar. Me relamo de gusto porque te gustase.
Creo que todos conocemos a alguna persona así, tratando al marido y a quien esté cerca.

Juan Antonio, puse tus admiraciones. Sí, quedan mejor, y limpié algunas frases. Felices vacaciones en Barcelona.

Un abrazo a los dos.

Vamos a ver esta viuda negra qué tal te ha quedado...

No se sabe quién narra, es alguien cercano pues conoce bien la historia. Ese detalle me gusta, queda en el aire.

un vientre que, no hace mucho, se le infló de no utilizarlo

Si hiciésemos una encuesta entre lectores normales y corrientes preguntando ¿Qué entendéis por "usar una mujer el vientre"?, no sé las respuestas que podríamos recoger. En mi opinión la mayoritaria no sería comer. El vientre de la mujer tiene otras connotaciones más exquisitas. Cuando hablamos del fruto del vientre de una mujer no hablamos de las deposiciones. Quizá algo que ver con el sexo, con parir, con menstruar... Pero como no hemos hecho la encuesta, no son más que elucubraciones mías. El caso es que "se le infló el vientre de no utilizarlo" me desorienta muchísimo, hasta pensé en gimnasia de abdominales... Después viene el comentario sobre la comida y me dije: Pero si alguien no come, adelgaza. No se le infla el vientre. Los niños de Somalia, pensaréis. Y en la posguerra aquí también los hubo. Pero eso es un caso extremo de desnutrición secundario a ascitis por hipoproteinemia, que no se da ni siquiera en la anorexia. Yo diría que a la gente que no come no se le infla el vientre; a la que se muere de hambre, sí. En cualquier caso, creo que eso rasca. Si a pesar de todo decides mantenerlo, es cosa tuya.

cuando llevaba el matrimonio como si fuera un sargento

El matrimonio es ella más su esposo. Como ella no se va a llevar a sí misma como un sargento, creo que la frase sería más clara diciendo "cuando llevaba a su marido como si fuera un sargento". Si insistieras en lo del matrimonio, sería al matrimonio.

Fermín, deja de rozarte con María... Me parece más claro.

Me gusta mucho la serie de órdenes, expresan muy bien el agobio agobiante

pero no es lo mismo, para la señora Marita debe ser distinto. No sé ver a qué viene esta repetición.

Le pondría a sus ojos un azul celeste... (les)
A ella le gusta que le llamen señora... (la)

Ya casi lo tienes. Es un buen relato.

Abrazos.

Pensé en ambas cosas, comida y falta de sexo. Una mujer andrógina. Si me dices que a los que no comen no se les hincha el vientre, lo cambiaré.

OK. Milagros, tienes que pensar, tienes que pensar...

OK

Es muy distinto dar órdenes a quien pagas que a quién (presuntamente) quieres. Para la señora, dar órdenes al servicio es lo normal, a su marido es una muestra de poder. Dime si te sigue pareciendo mal.
Los les/las/los ¿qué quieres que te diga?
Gracias, un abrazo.