En estos casos, doña Pepa, a veces sirve utilizar la analogía.
La norma es que el complemento directo no lleva preposición, salvo si se trata de personas (aparte algunos casos especiales).
Por ejemplo:
Voy a llevar el coche al taller (No "voy a llevar al coche al taller").
Voy a llevar a mi hijo al pediatra. (No "voy a llevar mi hijo al pediatra").
En el ejemplo que usted pone:
Voy a llevar el equipo al éxito.
Escrito así, el equipo es una cosa, podría ser la raqueta y las zapatillas, o las camisetas, calzones y botas. Pero no tiene sentido llevar al éxito esas cosas. A quien va a llevar al éxito es al equipo formado por una serie de jugadores, de personas. Por tanto, va a llevar al equipo al éxito.
En otros ejemplos sí podría haber confusión:
Voy a llevar el equipo a casa, dice un niño recogiendo del gimnasio sus prendas para que las lave su madre.
Voy a llevar al equipo a casa, dice el mismo niño cuando ha invitado a todos sus compañeros de deporte a merendar.
Espero haber solucionado su duda. Saludos cordiales